Lola y sus dos hermanas abandonan Polonia y se establecen en París, Francia. Aquí, Lola completa su educación en la Sorbonne y la École du Louvre.

En 1926, Lola es contratada por Hermès, donde diseña su primera colección de ropa para mujer. El conocimiento de Lola sobre textiles y colores juega un papel importante en sus diseños. Lola trabaja aquí durante los próximos 10 años, creando ropa, pañuelos de seda y carteras.

Lola deja Hermès y abre su propia casa de moda en 93 Rue du Faubourg Saint-Honoré en París.

A principios de la década de 1940, Lola exhibe sus piezas en un anuncio de página completa en una revista húngara. La colección incluye blusa, suéter, bufanda, cinturón, guantes y clutch.

En 1948, Lola Prusac comienza a crear sus propios desfiles de moda, incluida la aparición en la Semana de la Alta Costura de París.

En 1958, Lola lanza su primera fragancia, llamada Sega, envasada en una botella de aluminio con tapa de corcho.

En 1965, Lola sale con una cartera de armazón hecha de tricot y cuero. El material de tricot está cosido a mano con un patrón atrevido que todavía se incorpora en la actualidad.

Este anuncio presentaba a un modelo que mostraba las joyas de moda de Lola Prusac junto con el lanzamiento de su última fragancia, Grant de Crin, una fragancia fresca y neutral en cuanto al género.

En 1978, Lola Prusac recibe la aiguille d'or (aguja de oro), un premio francés para honrar a los diseñadores de moda talentosos.

Hoy, continuamos con su legado utilizando texturas, colores y siluetas inusuales para crear piezas distintivas y atrevidas. Una verdadera declaración de belleza.